- ¡Nabiki! Mm, Bueno, le deje la carta... espero la lea...

- Kasumi, hija, ya vámonos.

- Pero... ¿Y Nabiki?

- Estará bien. Acuérdate que se acostó muy tarde anoche.

Kasumi Tendo mira hacia escaleras, pensando en su hermana quien aun se encontraba dormida. Toma las maletas y dirigiéndole una dulce mirada a su casa, sale de ahí. Cuatro horas mas tarde...

- ¡Ah!- dice bostezando la chica de ojos cafés- me duele la cabeza... mm, dormí demasiado... ¿Qué es esto?

La delgada mujer ve y recoge una pequeña nota que hay en la mesa...

-¿Qué? ¿Dos semanas sola? ¡Grandioso! ¡Lo último que faltaba! Ni siquiera tengo el dinero para el tren...

En eso comienza a recordar lo que sucedió con su dinero...

**Flash Back**

- Bien hermana... debido a todo le que nos haz causado, a tus chantajes, sobornos, y lo demás, más te vale prestarnos tu dinero para la boda.

- ¿¿¿¿¿Qué????? Estás totalmente loca... ¡JAMAS!- decía la muchacha de cabellos cafés oscuros.

- ¿Ah sí? Bueno pues, entonces...

En ese momento se ve a la chica de cabello azul sacar una cinta de vídeo y ponerla en el vídeo. Empieza a ponerse la pantalla negra y enseguida aparece una imagen de Nabiki, seduciendo a Ranma, tocando su musculoso pecho, su cintura, y en esa parte... (n_nU) Nabiki observa la escena del vídeo y sonríe pícaramente. Akane al verla se altera pero no hace nada más que poner la cabeza de Ranma en sus pechos, susurrándole al oído "¿Estas... excita... exaltado?" A lo que el otro le responde bien bajito... Sí... ¡¡Mhhmmhm!!, En el mismo instante que en la película, el chico de ojos azules, al unísono que en el vídeo le sangra la nariz de excitación. Akane lo deja recostado en el suelo, mientras con las mejillas ruborizadas le limpiaba la nariz. Después se termina esa imagen y aparece otra en la cual también esta Nabiki pero con... P-chan... la chica dormía profundamente en su cama y en sus brazos, mejor dicho sus pechos tenía a él cerdito negro de Akane... Akane la miraba de reojo diciendo:

- Nabiki... y.... ¿Desde cuando?

- P... Pero yo... ¡YO NO-TENÍA IDEA AKANE!- contesto echa una furia la joven mujer.

- Entonces, di algo a tu favor hermana... - decía al instante en que se ruborizaba, al ver como el pequeño cerdito se acomodaba mas y más en los pechos de su hermana. Nabiki no lo podía creer... ella había de estar soñando con alguien esa vez, pues no recordaba haber tenido a P-chan en sus brazos, ni mucho menos haber dormido con él, lo peor era que eso significaba que había dormido con Ryouga. Después de terminarse esa escena, la misma chica, esta vez en el consultorio del doctor Tofú, esta se acercaba de una extraña manera, irresistiblemente coqueta, lo beso y lo abrazo, el doctor por lo que se podía ver le correspondió él beso pero no el abrazo "pervertido".

- ¡¡OH!! Hermana, ¿no tienes dignidad?

Nabiki sonrío satisfactoriamente al ver aquella escena y al escuchar las palabras de Akane, no, ella no se arrepentía de sus actos. Luego apareció, pero en el Neko Haten... con... con...

- ¡Moose! ¿También tienes lo que sucedió con Moose?- pregunto nerviosa... tenía miedo, Akane tenía algo con que chanteajarla... en realidad con Moose era con quien había ganado mas terreno que con cualquier otro, realmente no le convenía... ni mucho menos que supiera Shampoo.

La cinta siguió avanzando y en ella se mostraba como la chica, abrazaba efusivamente al chico, besándolo con pasión, mientras lo ponía sobre una mesa... antes de la cinta se escucho el siguiente dialogo:

"Hola Moose... estas solo... ¿no es así?

"Si Nabiki Tendo, estoy solo ¿porque? Le contesto el chico limpiando una mesa. La muchacha mira hacia los lados y se acerco mas al chico, el no se percato, hasta el momento en que se podía decir que ella estaba apegada a su cuerpo y le había quitado sus gafas... esta le propuso coquetamente

"Juguemos a que yo soy Shampoo, y te doy permiso de hacer lo que quieras conmigo..." A Moose le corrió un hilo de sangre por la nariz al escuchar tal petición de la sensual Nabiki, pero retomando la cordura le dijo..

"No... no podemos... Nabiki... ¡hhmp! Nabiki le serró los labios a Moose con un gran beso, que este, no pudo negar.

Llegaron a tal punto en que ambos se encontraban semidesnudos; arriba de una mesa besándose una y otra vez más, Moose se dejaba controlar pero a cambio, Nabiki lo dejaba tocarla entera, desde el cuello a las piernas, quedándose aquellas lerdas manos en su parte favorita, sus senos. Después se escucharon pasos ambos se separaron y Nabiki lo beso, en el beso la cámara se acerco mas y se pudo ver la lengua de ella, saboreando la boca del otro. Terminado el beso Nabiki, imitando a su hermanita menor saco de quien sabe donde un GRAN mazo y golpeo con el la cabeza de Moose. Gracias al cielo que esta chica no tiene la misma fuerza que su hermana, de ser así... pobre Moose.

- Bien- dijo Akane sorprendida y molesta, mientras que detenía la cinta y la tomaba en la mano- Tenemos mucho porque chantajearte Nabiki. ¿Aceptas?

- Rayos... haz ganado... supongo que quieres mis millones, y miles de yens a cambio de él silencio tuyo y de Ranma... ¿no?- decía la chica cruzándose de brazos.

- ¡Sí! Yo ya sabía que no eras nadita de tonta, ¿cierto hermanita?

Akane extendió su mano, recibiendo un cheque de su hermana, Nabiki tenía todas sus ganancias en el banco..." Oh... adiós dinero querido... que haré sin ti..." Decía en voz baja...

Akane esbozo una infantil sonrisa y salió del cuarto con Ranma arrastrándolo de una mano y con el cheque en la otra. Nabiki dio un gran suspiro, y se toco la cabeza.

- En realidad me convenía entregar mis yens, a cambio de tener mi imagen limpia...

Se decía tratándose de dar ánimos a sí misma... cosa imposible de suceder... Fue a la cocina, abrió el refrigerador y por suerte Kasumi le tenía preparada la comida para hoy y mañana. Cerro el refrigerador, subió las escaleras y se dirigió al baño. Se desvistió y dio el agua para darse una ducha. Sentía como el agua caía sobre su cuerpo, lo cual la hacia despertar, pues aún se encontraba adormilada. "Recuerdo perfectamente lo de Ranma, Moose y el doctor Tofú... pero lo de P-chan... no... no lo puedo recordar... no recuerdo haber dormido con el cerdo de Akane..." Cerro la llave del agua, se seco poniéndose la toalla alrededor de su curvilíneo cuerpo y dando un ligero suspiro salió del baño. Llego a su cuarto y se recostó en la cama... estaba triste pero no por el dinero, eso ya lo había superado... no, estaba triste por estar sola... sus amigas estaban en la playa, y ella no podía y en realidad tampoco quería irse a ese lugar. Pero tampoco quería quedarse sola, dos semanas, sola... ni siquiera podía disfrutar riéndose de las peleas de Akane y Ranma, estos peleaban menos, y más encima andaban de Luna de Miel en Hong Kong. No podía ir a comer donde Ucchan, estaba hace un buen tiempo cerrado, no podía venderle fotos de la pelirroja a Kuno... Estaba relativamente sola... y lo peor... sentía que no existía la persona ideal para ella... ¿qué hacer?... ¿qué rayos hacer?

Se durmió... o más bien intento dormir, cosa que no consiguió. Termino por vestirse y bajo a ver televisión. Nada, nada bueno. La apago y se dirigió a cocina a desayunar...

- Veamos... mm, Kasumi dejo por suerte mi comida favorita... pero... aquí hay comida para dos personas...

Ignoro lo que le había llamado la atención y fue a la mesa a comer. En el momento en que se disponía a engullir bocado una ventana se rompió, por lo que había deducido de aquel estrepitoso sonido que provenía de la habitación de Akane. Corrió hasta susodicho lugar y al llegar vio al pequeño P-chan tirado en el suelo. Se acerco hasta él y lo tomo con las manos... el pequeño cerdo estaba inconsciente y tenía una herida en la cabeza. Con rapidez fue al baño y curo las heridas de aquel animal. Vendo su cabeza y bajo a desayunar con él en los brazos. Fue a la cocina y saco la comida que sobraba y la puso en la mesa, al lado de una tetera con agua caliente. Empezó a comer y después de unos minutos sintió al cerdo moverse.

- Vaya, hasta que despiertas, ¿no?

El cerdo abrió los ojos y vio a la chica. Al principio penso que era Akane, y se acomodo en ella, Nabiki sonrojada tosió, y lo mojo con el agua caliente.

- ¡¡AHG!! ¡¡Esta muy caliente!!

- Toma- dijo Nabiki entregándole una toalla- cúbrete.

Ryouga miro hacia los lados, luego miro al frente y vio a Nabiki y se sonrojo por completo... se puso rápidamente la toalla en su cintura y Ryouga se sentó como si nada al lado de la chica. Nabiki sonrió un poquito sonrojada y le dijo:

- Siéntate aquí conmigo. ¿Quieres comer?

- Bueno... - contesto tímidamente el chico de cabellos negros...

Durante un buen rato hubo un increíble silencio que cualquier maestro admiraría de unos alumnos... pero estos no eran alumnos, eran unos jóvenes, tímidos... uno más que otro pero en el fondo eso eran. Ryouga aún mantenía sus mejillas sonrosadas, a diferencia de Nabiki que ya estaba comiendo rápidamente con las mejillas normales, sin color. El chico la miraba, muy avergonzado, sin saber si disculparse por su actitud con/en ella.

- Nabiki... yo lo siento...

- ¿Qué cosa?- le pregunto comiendo como si nada... esta chica si que es difícil...

- Bueno, tu sabes... lo de estar en forma de P-chan y... Eso... - le contesto sonrojado.

- Ryouga... no entiendo... ¿Quieres hablar claro? Somos jóvenes adultos y responsables, no entiendo porque hablar así.

- ¡Hem! Para ti debe ser fácil, ya que para mi no...

- Ryouga, tanto te cuesta decir: "Nabiki... discúlpame por haberme transformado en P-chan y haber pensado que eras Akane, y por haberme acomodado en tus senos" ¿Es tan difícil?

Ryouga estaba rojo como un tomate, cualquiera al verlo pensaría que tenía fiebre. Tomo aire y dijo:

- Nabiki... discúlpame por haberme transformado en P-chan y haber pensado que eras Akane, y por haberme acomodado en tus suaves senos, por cierto Nabiki. ¡Ops! Lo siento, Nabiki, no lo volveré a decir, ¡discúlpame! - Ryouga ahora si que parecía tomate, se inclino hacia abajo disculpándose frente a la chica de cabellos castaños.

A Nabiki una gota de sudor aparecía en su cabeza, mientras que un rubor aparecía en sus mejillas, estaba algo avergonzada por lo dicho de Ryouga, antes que una ofensa o falta de respeto le parecía un... halago.

Hasta el momento los labios de Nabiki estaban rígidos, pero de la nada se curvaron, haciéndola sonreír.

- Nabiki... ¿por qué te ríes? ¿Eh?

- Ja, Ryouga... por nada, olvídalo... ja, ja. Y deja de apenarte por todo, estas rojo como berenjena.

- ¿Y tu? Para tu información estas ruborizada. Y discúlpame, no sé lo que dije.

- Si lo sabes...

- ¿Dijiste algo?

- Sí, que comieras.

Ambos chicos sonrieron y volvieron a comer. En un momento Ryouga se detuvo a observar como se reía Nabiki, se veía muy linda con las mejillas ruborizadas y sonriendo de tal manera, era una sonrisa muy sensual, inocentemente sensual. Cosa que el cerebro de Ryouga, como pocas veces lo hace, percibió.

Después de comer fueron a la cocina, y el chico de buenos colmillos se ofreció a lavar la loza. Nabiki lo dejo encantada, no le gustaba ese que hacer y en su vida había escuchado a un hombre "pidiéndole" lavar esas cosas. Era admirable. Luego Nabiki lo llevo arriba a "ponerle ropa"... "No pensaras quedarte semidesnudo todo el día frente a mí" le había dicho a propósito para hacerle sonrojar, ella pensaba que se veía muy lindo así.

- Bien... como puedo ver no llegaste con tu mochila, así, que no tienes tu ropa para vestirte... solo nos queda algo de la ropa de Ranma...

- ¿Qué? ¡Jamas usaría la ropa de ese idiota de Saotome!

- ¿Sí? Pues la ropa de ese idiota es lo único que hay a tu medida, Hibiki.

- Esta bien...

"Me hizo caso..." pensaba para sí misma la asombrada Nabiki. Sacó unas camisas chinas sin mangas de color amarillo bien claro, y a la vez oscuro, tomo unos pantalones color negro y una cinta del color de la camisa, para que se amarrara los pantalones. Empezó a buscar sus zapatos y al final los encontró.

- Listo, aquí tienes.

- Sí... pero falta algo importante...

- ¿Uh?

Ryouga ladeo la cabeza, queriéndole decir que era lo obvio que faltaba.

La chica lo miró pensativa... ¿Qué era lo que faltaba? ¡Ah!

Nabiki se dio vuelta, abriendo todos los cajones de la ropa de Ranma, buscando la ropa interior que tenía el chico.

- ¡YA! Mm, toma - contesto extrañamente con las mejillas ruborizadas.

- Bien... ¿Puedes salir de aquí para vestirme?

- ¡Claro! ¿Acaso quieres que te vea desnudo?

Ryouga se ruborizo aún más. Nabiki lo miro tiernamente y salió de la habitación, en dirección a su pieza.

"Es tan extraña..." Pensaba Ryouga desde la alcoba de Ranma, a la vez que se quitaba la toalla, quedando desnudo. Tomo los boxer de Saotome y se los puso, subiendo sus fuertes piernas. Luego alcanzo los pantalones negros... y así sucesivamente hasta ponerse la camisa sin mangas.

"¿Por qué te encuentro tan atractivo al verte sonrojado?". Eres tan tierno y sensual a la vez... ¿Nabiki? ¿Estas pensando que el extraño amigo entre comillas de Ranma, tu nuero, es para ti un chico guapo... y atractivo... pero debo admitir que en realidad si es guapo, pero aun así no creo que me guste... no, no, no... imposible... pero porque no me puede gustar? ¡Ya! Suficiente, no voy a estar hablando como una tonta conmigo misma"

- Nabiki, ¿estas ahí?

-¿Ryouga? AOUCH!!! Me caí!!!

- ¡Nabiki!

El chico entró rápidamente a la habitación, asustado por el grito de Nabiki. Al entrar vio a la chica en el suelo, con los brazos extendidos y aparentemente desmayada... lo primero que vino a su mente fue: ¿Qué demonios estaba haciendo? Se acerco a ella y la tomo en brazos, para recostarla en la cama. Al hacerlo se acerco a ella y observo que solo dormía plácidamente. Coloco las manos de ella en su abdomen, y la tapo con cuidado. Jamás había notado algo... se veía muy linda durmiendo... incluso mas linda que Akane Tendo... tenía una piel muy linda, el cabello corto pero que denotaba su personalidad. La observo por un buen rato, evitando concentrarse en las partes íntimas de Nabiki, que para desgracia(¿o suerte?) Se notaban por encima de la delgada ropa de verano que traía puesta. Agito la cabeza, se puso de pie y la miro... parecía un ángel, nunca había visto ser tan dulce al dormir... exceptuando la menor de los Tendo. Dio media vuelta, sintiendo un calor en el pecho, sin saber que era. Salió de la habitación y fue a la cocina a cocinar y despejar la mente de la "señorita avaricia Tendo".

Bajo las escaleras... medio mareado sin tener respuesta a eso... "¿Qué siento por ella? Me causa una dulce sensación de... no se como explicarla... pero me gusta demasiado esto que siento..." Llegó a su destino y se lavo las manos para cocinar algo... había visto a Kasumi cocinar muchas veces y no era algo tan difícil... Empezó a silbar y tratar de concentrarse en los rábanos que cortaba con un cuchillo... Recordó... recordó una noche, en la que entró en la Casa Tendo y "supuestamente" entro en la habitación de Akane... esa noche, todo estaba muy oscuro, la pieza de Akane no era tan oscura... además sintió como si la cama de ella estuviera ubicada de otra forma... cuando subió a ella y se acomodo en el torso de la chica, noto que se "hundía" en sus senos... Eran más grandes y suaves que de costumbre... además ese día ella lo había abrazado mas dulcemente y no con tanta fuerza... había sentido un cariño diferente al que le profesaba su amada Akane... no le costo dormirse ya que esta noche la "fiera" estaba calmada... no escucho ni un "Ranma eres un idiota" "Te odio cretino" "Maldito pervertido", nada, solo la suave respiración de la supuesta "Akane". Cuando despertó estaba solito y la habitación a oscuras...

- De ahí ya no recuerdo más...

Siguió cocinando con esa intriga en su mente hasta que por descuido se corto un dedo con el cuchillo... empezó a maldecirse a él y al "arma del delito". Por suerte fue cuando cortaba otra cosa, nada que ver con el almuerzo, dijo mientras la comida en bandeja y fue al baño para vendarse la mano.

¡¡Ay!! Esto duele... que tonto... todo por culpa de... - sacudió la cabeza, se había ruborizado y no quería pronunciar aquel nombre- mejor... mejor me callo, iré a ver a Nabiki...

Al decir esto último salió caminando del baño con los brazos y las piernas extendidas al dar cada paso... y con la cara roja... parecía un soldado de juguete. Ya en la cocina tomo las dos bandejas y subió las escaleras en rumbo hacia la habitación del patito con nombre: "Nabiki".

Entro y con un poco de dificultad dejo ambas bandejas a los pies de la cama de la chica. Quedo de pie y miro hacia la ventana, suspirando... Luego se sentó en el suelo, al lado de la cama y espero a que Nabiki despertara...

Nabiki abrió los ojos, respiro hondo y se llevo las manos a la cabeza, le dolía... pero no recordaba muy bien él porque. Miro hacia los lados y recordó que estaba con el chico Hibiki. "Ryouga" murmuró, miro hacia los lados, hacia la ventana, vio el sol resplandecer y termino viendo bajo la cama, al chico de buenos colmillos que dormía. Se sentó y se destapo, miro nuevamente a Ryouga, entendiendo que él la había tapado. Sonrío y con una mano toco la mejilla del muchacho, queriendo despertarlo. Ryouga sintió una suave mano tocando su rostro y despertó, algo confundido y miro hacia donde se encontraba Nabiki y la vio mirarlo con ternura. Se sonrojo y bajo la vista, para luego subirla y mirar los castaños ojos de ella. La chica abrió los ojos y su sonrisa se acentúo aún más al ver al chico mirándola y sonrojado. Se miraron mucho rato de la misma forma, ambos sin miedo... el momento parecía eterno, y ninguno deseaba que terminara... Pero...

- Eh... Este... te traje tu almuerzo Nabiki...

Le dijo desviando ahora los ojos de Nabiki, que de una forma u otra lo hacían sentirse... ¿amado?

- ¡Oh!- el chico la había sacado de su encantamiento, los ojos de Hibiki la habían ¿enamorado?, ante tal pensamiento sacudió la cabeza, estaba muy enredada con sus propios sentimientos- Gracias, no tenías porque haberlo hecho...

- Bueno, de alguna forma tengo que agradecerte la hospitalidad que tienes conmigo...

- No te preocupes, para eso estamos las amigas, ¿no?

- Sí... eso creo...

- Mm, esto esta delicioso, mm, que rico.

- ¿Te gustó?

- ¡Me encantó! Que bueno eres cocinando...

El comentario de ella hizo ruborizar de pies a cabeza a Ryouga, que comía en silencio, con la vista en el suelo.

- ¿No quieres subir a la cama? ...- increíblemente ella no se ruboriza ante aquella ¿propuesta? ... - El suelo es muy duro, y no encuentro justo que yo este arriba y tu abajo...

Nabiki se detuvo... su mente torcida entendía perfectamente lo que ella decía... pero ella no quería decir eso... ella no estaba pensando mal... Tragó saliva y se sonroóo... bajando la vista al suelo siguió comiendo en silencio... ese maldito silencio del desayuno volvía a estar presente, pero ahora en el almuerzo... ¿Acaso siempre a la hora de comer pasaría lo mismo? Por su parte Ryouga no había "captado el sentido pervertido" de lo que decía hasta que pensó... pensó... pensó...

- Na--na--nabi--Nabiki... Yo...

- Ryouga... este... ¡jajajajajaJAJAJAJAJAJAAAAA! - sin pensarlo mucho comenzó a reírse como estúpida... (N.A: Bueno, muchas veces pasa que no sabes que decir y la tonta risita sale de tu boca... muchas veces empeorando la situación) La chica siguió riéndose; tenía la boca muy abierta, los ojos mirando hacia arriba y los brazos en su cintura... (N.A: una muy graciosa pose... si se la imaginan) Todo eso ante los expectantes ojos de Ryouga, que la miraba asustado... la risita de Nabiki ya llevaba unos 5 minutos, y Ryouga ya no aguantaba más. Se puso de pie y tomo a la chica de los hombros y la atrajo hacia él...

- ¡Ya deja de reírte así!

Nabiki dejo de reírse y miro a Ryouga, tenía las mejillas algo rosa y los ojos serios, mirándola. Se siguieron mirando, empezaban ya a respirar agitadamente... y sin pensarlo sus labios se acercaban... estaban a escasos centímetros de besarse... seguían mirándose... Nabiki sabía que era lo que iban a hacer... "un beso... solo un beso" lo miró con ternura, y toco con su mano derecha la mejilla de este, él solo le sonrío en respuesta ante aquel gesto... Ryouga la miraba con una gran ternura. Sentía que el amor que sentía por la bella Akane se había esfumado, dejándolo con un sentimiento hacia Nabiki... pero, ellos se iban a besar... se van a besar...

El chico tomo de la barbilla de Nabiki y ella cerró los ojos, lista para recibir un beso... Ryouga se acercó a ella; solo sentían ambos un calor en sus mejillas y un sentimiento que nacía en ellos... pronto la distancia que separaba sus labios desapareció, dejando sus bocas fundidas en un dulce beso, tímido al principio, dándose pequeños y cortos besos en las bocas del otro, para luego hacerlos más largos, apasionados. Nabiki puso delicadamente sus manos en el cuello de Ryouga, haciéndole cariño y disfrutando los besos que le daba el chico con tanta ternura y pasión; una sutil pasión inocente... Ryouga se sentía muy bien, se sentía querido, jamás creyó que Nabiki fuera tan dulce, tan tierna y lo quisiera... Los besos que se daban pasaron de cortos y pequeños a apasionados y largos, con más deseo, deseando ambos más que besos y inocentes caricias... La chica lo abrazó y lo atrajo a su cuerpo, para la sorpresa de él, pero, con las manos temblando la abrazo de igual forma y separó sus labios, para descansar su cabeza en el hombro de ella.

Nabiki suspiro y sentó a Ryouga y se sentó sobre él, abrazándolo nuevamente y acariciando su cabello... cerró los ojos... rápidamente los abrió no podía creer lo que había hecho... lo que habían hecho... Ryouga respiro profundamente, se sentía como en un sueño... un sueño que de ser sueño habría sido imposible... pero fue una realidad, había besado a Nabiki Tendo, la había abrazado y... había disfrutado de cada caricia y beso de ella... se sentía... feliz... pero sin saberlo arrepentido...

- Nabiki... yo... me...

- ¿Qué? Ryouga... yo... ¿qué hemos hecho? ¿Por qué?

- No sé, me disculpas... yo...

- Si... solo di me das... 50000 yenes... ¡Es broma! Dime una cosa... ¿nos besamos?

- ¡Ah! menos mal... pues... más... más de 5 veces... - le contesto un sonrojado Ryouga...

- Uy... - solo pudo decir Nabiki con la cara más roja de lo que la ponía el chico- No sé qué paso... me dejé llevar supongo...

"Yo también" pensó el chico.

- Bueno...

- Bueno...

- Mm.

- Mm.

- ¿Y ahora qué?

- Mm... no sé... ¿comemos?

- Si... Nabiki...

- Bien... comamos...

Ambos se separaron y sonrieron... una sonrisa eso sí, algo nerviosa y se dispusieron a comer. Nabiki respiró profundo y intentó comer... lo que había pasado la tenía muy asombrada y muy feliz... "Sus besos... fueron tan tiernos y tímidos... oh" no dejaba de pensar en el suceso que le había dado nuevamente un vuelco a sus sentimientos... Terminaron de comer y se miraron... cada vez que se miraban sentían como si eso no fuese suficiente entre ellos... cada mirada, era como una palabra, como la palabra que no se podía decir... ¿era una demostración tal vez?

Después Ryouga recogió una de las bandejas y le pidió a la chica la otra... ella se rehusó y le dijo que ella la llevaría y con una de sus dulces e inocentes sonrisas le agradeció. Bajaron las escaleras cruzando una que otra palabra... Ryouga no quería perder "el contacto" con ella, y le decía cualquier cosa... tratando de no sonar estúpido...

- Bueno, dámelos por favor...

- Bien... espera, ¿qué te paso en la mano?

- Nada importante...

- No me mientas Ryouga.

- Me corté- cedió él.

- Qué pena... bueno... creo que mejor yo lavo, ¿no? Además tu lavaste la loza del desayuno... así es más justo... - le dijo colocando sus dedos en los labios de él. Este ya como por reflejo se sonrojó y asintió con la cabeza. Ella le sonrió.

- Ahora espérame en la mesa o dónde te plazca...

- De acuerdo...

La jovencita se colocó el delantal de cocina de Kasumi, el de Akane no le entraba, tenía las caderas muy grandes y ella nunca tanto. Abrió la llave del agua y comenzó a lavar. El ruido del agua fue acompañado por la melodiosa voz de ella, ya que hizo algo que hacía cuando pequeña, cantó... recordaba que su madre lo hacía siempre... siempre hacía las cosas cantando... tenía una voz tan dulce...

Mientras Nabiki cantaba y lavaba las cosas, Ryouga se había ido a sentar frente al estanque, donde frecuentemente el señor Tendo y Genma jugaban shoji. Miro las libélulas que volaban sobre el agua... pensando... y recordando... Nabiki era muy buena con él... ella lo trataba bien, se habían besado... lo había besado y... eso le gustaba, ella era muy dulce y "muy hermosa"

- ¿Ah? ¿Y quién es muy hermosa?

- ¿Qué?

El pobre habló en voz alta y del asombro que le dio Nabiki se cayó... al suelo...

- Na-nanana- ¡NABIKI!

- ¡Cálmate! Y dime, quién es muy hermosa...

- ¿Eh? Yo no he dicho tal cosa- mintió él.

- ¿A sí?

- ¡Sí!

La chica sonrió "malévolamente" y de su bolsillo sacó una grabadora. Puso "play"... "Ah... es muy hermosa" ... se escuchó...

A Ryouga le corrió una gota por la cabeza... estaba asombrado.

- Mm... el hábito no hace al monje...

- ¿Ah? No importa, haré como si no lo hubiese escuchado... pero ahora dime, ¿Quién es hermosa?

- Bueno yo... este...

- Si me dices no te cobraré...

- No es eso... es que... "¿Cómo te digo lo hermosa que me pareces?"

- Mm... Ryouga... mírame ¡y no te sonrojes! Ja... "Tal vez esta idea funcione" Si no me dices... - su tono de voz sonaba peligroso...

- ¿Si no te digo qué?

- Si no me dices...

- ¿Qué?

- Si no me dices...

- ¡YA HABLA MUJER!

- ¡¡SALDRÁS CONMIGO EN UNA CITA!! ¡Y NO ME DIGAS MUJER!

- ¿Ah? - el chico quedó sin habla y para variar con la cara roja... "Una cita... con ella... yo..." ¡Pues no te diré!

- ¿A sí?

- Sí. - afirmó con los brazos cruzados y mirando a otro lado.

- Bueno, tendrás que salir conmigo.

- ¿Y si no quiero?

- Si no cooperas, le diré a tu querida Akane que quisiste, - la chica se sonrojo notoriamente- violarme.

- ¡¡¿QUÉ?!! - preguntó asustado y con los ojos desorbitados.

- Lo siento. Si no aceptas lo diré.

- No es justo... aunque...

- ¿Aunque qué?

- Aunque acepto... pero Akane no se enterará, ¿cierto?

- Palabra de honor...

- Si es tu palabra de honor, sellémosla - propuso el chico sonriendo.

- Mm, de acuerdo. Sellémosla...

- /Juntando sus meñiques y recitando al mismo tiempo/ "Esta es la promesa del dedo chiquito que hizo el pulgar y el índice y el que no la cumpla se quedará sin el chiquito"

- Prometido - Sonrío la joven.

- Prometido- contesto con sus ojos expectantes.

Al momento de decir prometido ambos se tomaron de las manos... en aquel instante el viento sopló, meciendo sus cabellos y haciendo sonar la "campanilla" que estaba sobre sus cabezas. Y, sin dar mayor aviso, Ryouga tiró de la mano de ella, haciéndola resbalar y caer en sus brazos... pero aún mas cerca de sus labios... sonrío pícaro ante la mirada asombrada de Nabiki y la besó... un beso rápido y en realidad... gracioso... Nabiki tenía los ojos abiertos del asombro pero no tardó en cerrarlos para hacer mas cómodo el beso robado de Ryouga. El viento siguió soplando... haciendo aún más hermosa la escena... De pronto... Ryouga se separó de ella...

- Eh... yo... mejor vamos a alistarnos para salir, ¿no crees?

- ¿Ah? - dijo "algo atontada" por el beso- Si... - balbuceó.

Y, en menos de lo que canta un gallo, Ryouga salió, mejor dicho corrió escaleras arriba con el rostro rojo, dejando a una Nabiki con la cabeza erguida, aún por el beso y una sonrisa llena de júbilo y victoria... ¿victoria?

- Mm... Ryouga... no puedo creer que estés... "enamorado de mí" - pensó.

Tocó con su mano los labios ardientes por el beso robado.

Notas...

Anto-chan reportándose con un nuevo fic.

Uy!! se suponía que este sería un One Shot, pero de haber sido así saldría

demasiado largo. Por eso decidí hacerlo en 2 partes... máximo 3. Lo vengo escribiendo desde hace mucho, ya que como tenía otras cosas que hacer se me había olvidado. En realidad quiero que sea lemon y romántico...

Y bien... Iory!!! necesito que me mandes la parte de la cita con la cual quedaste en ayudarme. Jiji...

Dudas, comentarios, ayudas, quejas, demandas... >_< Mejor demandas y ofensas no. ¿Oka?

o a